Un tema central en estas fechas, que comienzan un mes antes de Rosh HaShaná, con el comienzo del mes de Elul, y hasta ya pasado Iom Kipur, es la Teshuvá, acción que engloba conceptos como perdón, arrepentimiento, reconciliación y mejoramiento de nuestras acciones y actitudes, entre otros significados que le da nuestra Tradición a la Teshuvá.
Me quiero ocupar de una de estas facetas: La reconciliación ¿Cómo instrumentamos la Teshuvá en este sentido? ¿Cómo logramos recomponer relaciones descompuestas?
En estos días, repetiremos la frase de la Torá, que a su vez forma parte de nuestra liturgia y Tefilot de Iamim Noraim “Salajti Kidbareja / Dijo Adonai: “He absuelto según tu palabra” (Bemidbar-Números 14:20).
¿Cómo logramos el perdón de la otra persona? ¿Cómo logramos perdonar?
Un relato del “Iehudí HaKadosh” de Pshisja (Yaakov Yitzchak Rabinowicz; 1766–1813), nos puede ayudar a entender un modo de instrumentar la reconciliación.
El Iehudí HaKadosh dijo una vez:
Cuando era un niño, y aprendía el abecedario hebreo con un maestro, adquirí para mí un gran aprendizaje, y fue este: Cuando dos personas se sientan juntas a beber una copa, y cada uno de ellos se deja de lado a sí mismo por su prójimo, y no se ve a sí mismo superior al otro, entonces Dios les perdona a ellos todas sus transgresiones. Y esto lo aprendí cuando estudiaba el alef-bet (abecedario hebreo), al preguntarle a mi profesor:
– ¿Qué es este puntito?
Y me respondió: -Es una letra ‘iud’ (decima letra del abecedario hebreo י).
Y le volví a preguntar: – ¿Y qué son aquellos dos puntos יי?
Y me respondió: -Dos letras ‘iud’ son el Nombre Santo de Dios Bendito Sea.
Y a partir de eso, cada vez que veía los dos puntos ( : ) que separan un versículo del Tanaj (Biblia) del otro, pensaba que también era el nombre de Dios, y allí me dijo mi maestro:
-Aprende este principio general para ti: Si están escritas las dos letras ‘iud’ rectas, las dos letras en una posición equivalente, y no una sobre la otra, ese es el nombre de Dios; pero cuando veas que una está encima de la otra (dos puntos :), no se trata del nombre de Dios,sino simplemente de dos puntos.
Y de esto aprendí, que cuando dos personas vienen juntas, y ninguna de las dos se cree a sí mismo superior a la otra persona, ellos dos son considerados como si representaran el nombre santo de Dios.
Ahora ¿De dónde sale esto de la copa (kos כוס)? ¿De dónde lo aprendemos? “Kos” son las tres primeras letras del versículo que dice “Vaiomer salajti kidvareja”, pero todavía nos faltaría para completar el versículo la palabra “Adonai” luego de “Vaiomer”, y eso lo completan las dos personas que vienen juntas a tomar una copa del modo que ya mencionamos, de igual a igual, ellos dos completan el versículo con el nombre de Dios, y así completamos el versículo como corresponde “Vaiomer Adonai salajti kidvareja – Dijo Adonai: He absuelto según tu palabra”.
De este relato que refleja la visión de un niño, inocente, podemos aprender y tomar la iniciativa, en estos días que cambiamos de año, intentar revisar nuestras acciones, y tomarnos un café con la gente que queremos y, quizás, pudimos habernos alejado, por acción u omisión. Será seguramente este modo una forma para llenar nuestras vidas de santidad y de Presencia Divina.
Desde el Seminario Rabínico les deseamos a todos un año de crecimiento personal, familiar y comunitario, en Torá y Mitzvot, un año lleno de momentos felices y compartidos con la gente que queremos.
SHANÁ TOVÁ UMETUKÁ
Rabino Meir Szames
Director
Seminario Rabínico Latinoamericano