Leemos esta semana Parashat Reé, una parashá inmensamente rica en contenidos y enseñanzas, que sigue con este extenso discurso que pronuncia Moshé  para despedirse y dejar su legado al pueblo de Israel. Ya la primera frase de la parashá es increíble y ha sido comentada de todas las formas posibles, aquella que dice “mira  lo que hoy pongo ante ustedes, bendición y maldición”. Hoy simplemente compartiré con ustedes una de mis interpretaciones preferidas, la que tal vez más me llega a mí.

 

Cuando leemos “Reé – Mira”, habla en singular. Un posible significado de esto es que se dirige a cada uno de nosotros, a cada uno como individuo, otorgando autonomía a nuestras decisiones. Así mismo nos ofrece la bendición y la maldición, otorgándonos así a cada uno de nosotros la posibilidad del libre albedrío, donde es nuestra decisión el cómo actuamos, más allá de si es correcto o no. Es así como cada uno también es capaz y autónomo a la hora de tomar decisiones que marquen cambios importantes, como lo han sido los grandes personajes de la Historia.

 

Cuando dice “Noten Lifneijem – que pongo frente a ustedes”, se produce una contradicción sintáctica, de un momento a otro pasa del singular al plural. Es en ese momento cuando pasa de hablar del individuo a un colectivo completo, donde descubrimos que no somos seres aislados sino que vivimos en un mundo de semejantes a nosotros, donde la suma de todas las decisiones conforma una sociedad. Aunque la oportunidad es de cada uno, cada decisión que tomemos repercute en todos, siendo las consecuencias sociales.

 

Finalmente otra palabra que no se puede dejar de lado es “Haiom – hoy”, que otorga el valor más importante y cierra una idea. Las decisiones las tenemos que tomar cada día. Todos los días vemos nuevamente si elegimos para bien o para mal, a cada momento, y es por eso que existe la capacidad de reflexión y corrección, ya que si bien no podemos volver atrás para decidir de nuevo, podemos elegir solucionar nuestros errores con sabiduría.

 

Este Shabat comienzan los Iamim Noraim, los “Días Temibles” si traducimos literalmente. Se nos presenta todo el mes de Elul como preámbulo, como oportunidad al retorno, donde podemos reevaluar nuestras elecciones y elegir con mayor sabiduría para tratar de enmendar aquello que no hicimos tan bien. Que este Shabat previo sea de reflexión, de reconsiderar nuestras vidas, de preparar el camino a transitar este mes para así llegar tranquilos y en paz a las “Altas Fiestas”.

 

Benjamin Alaluf